lunes, 3 de octubre de 2011

Un mal día. Un lunes.

Cada mañana, el cansancio, el sopor, te ruega que te quedes en la cama, que no te levantes, que no te muevas, pero nunca de forma tan cruel, insistente y duradera como un lunes.

Gran cantidad de gente opina que el lunes es el peor día de la semana, en el que más te cuesta hacer todo, en el que prácticamente has perdido la rutina y aún acumulas el cansancio del fin de semana, de ese descanso que es mas cansancio que otra cosa. Sin embargo, no soy de los que comparten del todo esa opinión, creo que, en ocasiones, hay días peores.

Hoy, hoy no ha sido un buen día, aunque han habido otros mucho menos agradables. ¿Por qué?
Jamás pensé que llegaríamos a estos extremos, que lo harías de esta manera, que serías capaz de tanto, que todo aquello que me hiciste saber que te importaba no es más que cenizas ligeras que están listas para ser llevadas lejos, lejos de nosotros, y que no necesitan el viento, sino el tiempo, ese tiempo que ya ha pasado y que ha dejado huella en alguna parte de mí. En fin, nunca lo consideré o, mejor dicho, nunca quise considerarlo. Tus actos creaban contrastes visibles, perceptibles, pero a la vez, pulían la superficie de las situaciones para hacerme ver, una vez más, que querías y no podías, que me alentabas pero que no debías alentar, que no podías entenderme, pero que, a la vez, querías intentarlo. No importa. No quiero volver a verte.

Y después de él estás tú... TÚ, tan diferente, tan real... Nunca imaginé que tuviese la suerte de conocer a alguien como tú, que a través del cariño consiguiese eliminar todas mis penas, mis vacíos, logrando sacar lo mejor de mí, que lo intentase todo y cuando digo todo, es todo.
Posiblemente, eres una de las razones por las que sonrío día a día, por las que me levanto, por las que no temo a perder algo, siempre que no seas tú, porque si te pierdo me muero.
GRACIAS por estar siempre, por quererme y por demostrármelo. Nunca te pediré nada, solo te lo daré todo a excepción de esta vez, sabes de sobra lo que es.

Retourne, s' il te plaît. Je t' aime a la folie.